Nuevo esquema de racionamiento de agua en Bogotá: Así funcionará a diario

El Alcalde Carlos Fernando Galán anunció que volverá el racionamiento diario de agua en Bogotá como nueva medida ante la crisis de desabastecimiento en embalses.

Ante la alarmante caída de los niveles en el Sistema Chingaza, la administración del alcalde Carlos Fernando Galán ha decidido implementar racionamiento diario de agua en Bogotá. Esta decisión llega tras 34 días consecutivos de descenso en las reservas, exacerbadas por la escasez de lluvias.

Este viernes, Galán, junto a la gerente del Acueducto, Natasha Avendaño, convocó una rueda de prensa a las 10:15 de la mañana para comunicar oficialmente la medida. La situación se había vuelto crítica. “Este ha sido un año con afluencias muy por debajo del promedio histórico”, afirmó Galán.

Con menos del 45.40% de capacidad en Chingaza. El alcalde anticipó que, si no se controlaba el consumo y las lluvias no llegaban, el racionamiento era inevitable.

Días atrás, el mandatario había advertido que, de continuar esta tendencia, se verían obligados a aplicar medidas más severas.

Vuelve el racionamiento diario de agua en Bogotá

“Si el 21 de septiembre no cambia la situación, avanzaremos hacia una restricción mayor”, declaró. Las proyecciones iniciales sobre el fenómeno de La Niña habían permitido reducir las restricciones en junio, pero ahora, ante el incumplimiento de esas expectativas, la situación exige un nuevo análisis.

Natasha Avendaño, durante una visita al embalse de Chuza, también enfatizó la gravedad de la situación. “Hemos superado los 17 metros cúbicos por segundo de consumo en días sin restricción”, alertó, subrayando la importancia del ahorro y la responsabilidad ciudadana en esta crisis.

Los turnos de racionamiento se implementarán en las nueve zonas de la ciudad, con un ciclo diario en lugar del día de por medio que se aplicó desde julio. Esto significa que los habitantes de Bogotá deberán ajustarse a nuevas rutinas para el uso del agua.

“Encendimos las alertas sobre la necesidad de ser más conscientes con el ahorro”, reiteró Avendaño, instando a los ciudadanos a colaborar en la reducción del consumo.

La crisis hídrica no solo afecta el suministro, sino también el bienestar de los bogotanos. Si la situación no mejora, el panorama podría tornarse más complejo. Galán y su equipo continuarán monitoreando la situación durante esta semana para tomar decisiones informadas sobre el futuro de la gestión del agua en la capital.

Con esta nueva medida, los habitantes de Bogotá deben estar preparados para una realidad difícil y trabajar juntos para mitigar el impacto de esta emergencia. La colaboración ciudadana será clave para enfrentar este reto y asegurar un suministro de agua sostenible en el tiempo.

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