¿Cuáles son los cambios que habrá a partir de noviembre en la factura del Acueducto?

Mantente atento a los cambios en la factura del acueducto, los cuales permitirán una mejor lectura del recibo para evitar confusiones.

El servicio de acueducto en Bogotá, administrado por la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB), es esencial para más de ocho millones de habitantes. Este sistema está respaldado por la Alcaldía Mayor de Bogotá, la DIAN, encargada de aspectos tributarios regulares. Recientemente, la EAAB anunció una importante actualización en el formato de su factura, un cambio diseñado para mejorar la experiencia de los usuarios y fomentar el consumo responsable.

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¿Qué cambios trae la nueva factura del Acueducto de Bogotá?

Se han introducido cambios significativos en el diseño y funcionalidad de la factura con el propósito de hacerla más clara y fácil de usar.

Entre las características más destacadas de esta actualización se encuentra la incorporación de una visualización clara de la liquidación, que permite a los usuarios identificar con mayor precisión el desglose de su consumo mensual. Este ajuste busca facilitar la comprensión de los costos y promover un uso más consciente del agua.

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Además, se han implementado alertas visuales que, mediante colores, destacan la variación en el consumo de agua entre periodos. Este detalle es clave para ayudar a las familias a identificar posibles incrementos en el gasto y ajustar su comportamiento si es necesario.

Por otro lado, un código QR ha sido agregado a la factura, ofreciendo acceso directo al portal de la EAAB para realizar pagos en línea a través de PSE.

Un cambio que promueve el consumo sostenible

En línea con la responsabilidad ambiental, la nueva factura también incluye recomendaciones prácticas para optimizar el uso del agua. Estas sugerencias, personalizadas según el consumo, tienen como objetivo reducir el desperdicio y concientizar a los usuarios sobre la importancia de este recurso vital.

Este cambio no solo mejora la experiencia de los usuarios, sino que también responde a las exigencias normativas de la DIAN en cuanto a la documentación electrónica de servicios públicos.

Con estas modificaciones, Bogotá da un paso adelante en la gestión sostenible de los recursos hídricos, asegurando que tanto la comunidad como el medio ambiente se beneficien de estos avances.

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