Los animales debido a que no tienen quizás ese raciocinio propio de los seres humanos, nacen con un alma pura y llena de amor.
Los orangutanes tienen unos instintos paternales bastante impresionantes.
Y esto fue confirmado hace poco, cuando Rajang, un orangután en el zoo de Colchester de Gran Bretaña, fue filmado besando el vientre de una mujer embarazada a través del cristal.