Modalidades para adulterar taxímetros, ¡mucho ojo!

De acuerdo con las autoridades, cerca del 60% de las denuncias que hacen los usuarios frente al servicio de taxis de la ciudad es que están ‘muñequeados’, es decir, que tienen el taxímetro adulterado.

Este tipo de acción genera que las unidades corren más rápido de lo que deberían, por lo que los costos de movilizarnos nos pueden salir por un ojo de la cara. Es importante aprender a conocer estas conductas para así hacer las respectivas denuncias.

Las modalidades para adulterar taxímetros cada vez están peores

Para poder alterar los taxímetros, los taxistas utilizan diversas estrategias:

1. Iniciar el recorrido del taxímetro con tarifa nocturna (TIPO 2), cuando debe estar programada en diurna (TIPO 1).

2. La manipulación más común encontrada es la del turbo, que se lo detecta en la RTV debido a que no corresponde al valor que debería entregarse a una distancia determinada, siendo este valor mayor al que debería entregar. Suelen colocar un switch por el volante para activar al mismo.

3. Software: Implica en el cambio de la memoria del taxímetro y adulteración de la programación, con lo cual alteran el recorrido, es decir, cada 120 metros el incremento debe ser de tres centavos según lo establecido, en la adulteración del programa haría que por cada 100 metros, o una distancia menor, el incremento sea de tres centavos.

4. Neumático: En algunos casos el propietario del vehículo instala neumáticos con un aro de tamaño menor al permitido por las especificaciones del vehículo, esto para que registre más vueltas y pueda cobrar más, hecho controversial porque con un diámetro de rueda más pequeña, el consumo de combustible aumenta.

5. Presión del neumático: Cuando la presión de los neumáticos no es la correcta con lo que aumenta la distancia de recorrido.

Cifras del Distrito indican que cada semana llegan a los despachos de la Secretaría de Movilidad al menos 25 denuncias por estas adulteraciones, que se suman a otras 15, en promedio, por otros hechos, entre los que predomina el ya tradicional “por allá no voy”.

¿Te ha tocado alguna de estas formas de muñequear? Déjanos tu respuesta en los comentarios y no olvides compartir esta nota con tus amigos.

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